16 Jun AIRSOFT poderoso aliado en los entrenamientos
Desde hace mucho tiempo convivimos con una herramienta más para llevar a la práctica los entrenamientos técnicos que facilitan la operativa profesional de los componentes de las distintas FF.CC.SS.
Pero ¿qué son y qué permiten hacer?
Para empezar hay que definir que es el Airsoft. Podríamos decir que es un pseudo deporte o un juego donde se recrean innumerables unidades, principalmente militares, en lo que respecta sobre todo a indumentaria y armamento. Es precisamente en el armamento, donde múltiples firmas comerciales llevan proporcionando a estos jugadores réplicas de armas reales, la cuales impulsan proyectiles esféricos de plástico conocidos como “bb” (ball bullet), en calibres de 6 u 8 mm.
Lo principal en este tipo de armas, ya que la Intervención de la Guardia Civil las considera como tal en su reglamento sobre armas en la 4ª categoría, asemejándolas a carabinas de aire comprimido. Finalmente esa es la denominación con las que se les conoce, “Ald” (arma lúdica deportiva).
Así pues los fabricantes buscan el replicar un arma de fuego y transformarla en una marcadora que permite llevar al limite toda la recreación, pues la finalidad del juego es combatir entre unidades a la vez que se deben conseguir completar distintas misiones.
Esto último es lo que determina el valor añadido en el empleo de estas armas por parte de componentes de FF.CC.SS. en los entrenamientos puesto que pueden trabajar con un arma idéntica a la que tienen de dotación. Además permite que ese entrenamiento se pueda llevar al extremo, finalizando situaciones operativas con el uso propio del arma sin el peligro que esto supondría hacerlo con un arma cargada, que por supuesto, a parte de desaconsejable, estaría más que prohibido por sentido común.
Otra línea de este beneficio la encontramos en el hecho de lo económico que puede resultar su adquisición, así como el precio de la munición. Esto abarata cualquier coste añadido en un curso pero permite que el realismo sea tal que el miedo a recibir un impacto, ya que hay que decir que tienen su grado de peligro por la potencia de salida en boca que puede alcanzar el proyectil, y es por esto recurrir obligatoriamente al uso de protecciones para los ojos, utilizando gafas de protección balística y también muy aconsejable el uso de mascaras protectoras evitando que pueda ser impactado un diente.
Esto último obligó de alguna forma a regular las potencias de estas armas y aconsejar las distancias mínimas a las que se puede disparar a otro participante. Obviamente en un entrenamiento se incumplirán esas distancias pero las potencias seguirán siendo las mismas por lo que el daño aumenta y esto otorga ese realismo especial que se precisa en dichos entrenamientos.
Existen otros sistemas que permiten utilizar parte de la propia arma del cursillista, pero estos sistemas son mucho más caros de adquirir y el precio de la munición también es mayor. Es cierto que el realismo de estos elementos estriba en el ruido de una detonación de un arma, esto es algo que las ald´s no consiguen por su mecanismo de funcionamiento. Ahora bien, para todo lo demás están perfectamente a la altura de un arma real, por tamaño y por forma. Eso facilita perfectamente el uso con fundas destinadas a sus hermanas de fuego, también el uso de los porta cargadores que se hace compatible igualmente.
Todo lo dicho anteriormente ha hecho referencia a las armas cortas, pero hay que añadir que las armas largas no suelen llevarse a los cursos por no ser armas de dotación individual. Sin embargo, tener la posibilidad de conseguir la copia para un entrenamiento es sin duda lo que le vuelve a dar, a las réplicas de airsoft, la ventaja con respecto a otros sistemas, el motivo es que no suelen hacerse componentes para armas largas para recalibrarlas y poder utilizar munición marcadora de igual modo a como se puede hacer con las armas cortas. Se debería recurrir a munición de fogueo y la posibilidad de impactar sobre algo o alguien ya no conseguiría ese realismo final.
Por lo tanto, la conclusión es que el uso de ald´s está más que indicado en los entrenamientos técnicos donde la utilización del arma es más que necesaria. Hacer puntería con ellas es sumamente fácil y esto es precisamente lo que se trata de conseguir con los entrenamientos, un buen manejo perfecto para complementar un posterior trabajo de entrenamiento real sobre blancos en la galería de tiro.
La única pega es que no reproducen el sonido del disparo pero eso es un mal menor que no influye en el resultado que se espera.